Durante muchos años, la fluctuación de los precios internacionales de café ha afectado considerablemente a los productores, principalmente a los agricultores mas pequeños. Es lamentable que los productores, con el precio de café establecido a nivel internacional, ni siquiera logran pagar el costo total de producción con lo que obtienen por cada libra de café. Desgraciadamente, esto es muy común en familias de pequeños productores que dependen económicamente de sus cosechas de cafe.
En 2001, los precios cayeron a 45 céntimos de dólar por libra, posteriormente, el año siguiente con una sobre producción de un 8% de café, trajo como consecuencia la crisis del café, mostrando una devastación económica para muchos países productores de café. Más de 100 millones de personas fueron afectadas por la crisis, entre ellas agricultores, comerciantes y vendedores.
A raíz de esto, luego que se estabilizaran los precios internacionales, nacen las políticas de comercio justo, reforzando a los pequeños productores. La certificación para productos de Comercio Justo garantiza precios mínimos fijados y relaciones comerciales a largo plazo con condiciones justas permanentes a las cooperativas de pequeños productores en los países productores, podemos mencionar el ejemplo de Honduras, México, Perú, Colombia, Bolivia, Guatemala, Ruanda y Etiopía.
En este sentido, Honduras sería el país número 27 dentro del movimiento internacional por el Comercio Justo y la ciudad de Marcala la primera en ser declarada por un acuerdo municipal: Ciudad del Comercio Justo, lo que conlleva el compromiso de promover y apoyar esta iniciativa a través de políticas públicas, campañas educativas y de sensibilización y acciones encaminadas a reconocer y premiar a las entidades involucradas con el Comercio Justo. En Marcala, es la Cooperativa de Café Orgánico Marcala, S.A. (COMSA), la cooperativa referente a nivel nacional de la agricultura orgánica y de comercio justo.
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